Estamos convencidos de que hay algunas obras literarias cuya estructura o sistema de ima′genes no se manifiestan en toda su riqueza o trascendencia si se prescinde de su trasfondo mi′tico. Pues, a nuestrn parecer, A′gata Ojo de Gato, la segunda novela de Jose′ Manuel Caballero Bonald, pertenece a este tipo de la novela. En este punto de vista, para acercarse al o′ptimo entendimiento de nuestra novela, buscar los elementos mi′ticos o mitolo′gicos parece inevitable y fundamental. Podemos dudar de este punto : ¿Habra′ alguna razo′n especial en su uso? Poliziano utiliza la imagen de Orfeo para expresar sus ideas sobre la imagen del poeta. Caballero Bonald, igualmente, cuenta con los mitos para expresar sus ideas. Normalmente los literatos, segu′n Asi′s Garrote, se acuden a los mitos en busca de rotundidad expresiva y han vuelto e′stos con fuerza para suscitar en los lectores sentimientos que acentu′an los enigmas y las contradicciones del hombre moderno. Tal vez, nuestro autor queri′a expresar el origen y cara′cter de su tierra natal, la Baja Andaluci′a. Sentiri′a la necesidad de volver al origen, contando con los mitos - sobre todo, el mito de la Tierra Madre, el de los mediterra′neos - mezclando con la historia real tarte′sica, la cual es tambie′n de su tierra. Nos referimos al tesoro descubierto por el normando, que procede de Tartessos, el presunto pai′s que existiera en Andaluci′a la Baja. El uso del mito es, solamente, otro modo de acercarae a su pai′s, a su gente o a su tierra, adema′s con imaginacio′n. De esta manera, su novela se convierte en otro mito o leyenda ; esto es lo que intenta, seggu′n confiesa. Por consiguiente, el Caballero Bonald de A′gata Ojo de Gato, si bien, a primera vista, parece que cambia casi totalmente su actitud al escribir, no es otro, o, si igualdad es una palabra exagerada, no es tan diferente de lo que pensamos en la comparacio′n con el de Dos di′as de setiembre, su primera novela, perteneaente al realismo social, en lo que respecta a la comunio′n con su soaedad. El cambio extraordinario entre las dos primeras novelas no esta tanto en la intencio′n o el contenido, sino en el empleo de la te′cnica, ya que Caballero Bonald esta′ siempre con la gente y la naturaleza de su tierra.